Pues así siguieron y el tiempo les puso frente a frente de nuevo con precisión en momento y lugar. Sabe usted bien que no pronunciaron de nuevo esa frase, que se cruzaron y fue algo relativo, diferente, algo consecuente. Sin embargo fue como si el tiempo no hubiera pasado, como si volvieran a empezar. Hicieron las paces con el destino, no le mentiría si dijera que ahora él está dudando en si regresar al camino que una vez dejó. Pero ella pronto, muy pronto se alejó. Usted sabrá que les pasó, usted lo sabe todo; supongamos. pero también supongamos que el amor despertó, por favor dígame qué pasaría si despertara. Dígame si el primer amor vuelve, me encantaría saber si ellos alguna vez desearán volver a encontrarse, volver a besarse, a mirarse con cuidado y ternura. Dígame, si no es mucho saber, si alguna vez ella sería de nuevo su princesa. Dígame si fue real para ellos, dígame, por favor, si será real para mi; porque yo no esperaré nunca a que regrese, es demasiado tarde. Pero tendré en cuenta que por algo dirán que más vale tarde que nunca. Dígamelo pronto porque no quiero regresar ahí; por favor.
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